El piloto de Castroverde César Gonzalves y su copiloto, Miguel Peña, afrontan con mucha ambición el rallye de casa, que llega en un buen momento para reavivar los ánimos tras una temporada poco satisfactoria, con muchos problemas mecánicos en los tres últimos rallyes y un séptimo puesto en el Rali do Cocido como mejor posición.
A pesar de todo, Gonzalves se muestra confiado para el Rallye San Froilán y para el cual ha realizado esta semana unos test preparatorios con el objetivo de volver a coger ritmo de carreras. El piloto lucense declaraba que «el objetivo para este rallye es vencer dentro de la Top Ten Pirelli entre los cuatro ruedas motrices y obtener así muy buenos puntos dada la ausencia de nuestro principal rival, José Manuel Lista. En cuanto a la general, hay muchos coches competitivos inscritos, así que estaremos contentos si nos libramos de los problemas mecánicos y nos metemos entre los diez primeros».
El de Lugo siempre ha sido un rallye de los más complicados de la temporada, y sobre los tramos, Gonzalves reconocía que «Begonte va a ser el tramo que decida el rallye, con muchas trampas y cambios de ritmo. Mosteiro es otro tramo donde creo que se van a marcar diferencias, mientras Adai es un tramo que pasa muy cerca de mi casa y que este año se hace en sentido inverso, con alguna zona que no se recorría desde 1989. En general, los tramos son estrechos, con muchas curvas donde cortar, lo que implica suciedad en las segundas pasadas».
El equipo quiere agradecer a todos los patrocinadores su apoyo para poder tomar la salida en este rallye, del que esperan obtener un buen resultado.