El Rallye Islas Canarias es una de las citas más importantes del año en el panorama nacional, y Alberto hizo una excelente actuación a bordo del Abarth 124 RG-T, aunque los resultados se vieron truncados al final de la carrera por una serie de imprevistos fuera del alcance de todos.
El equipo madrileño empezaba la prueba ganando las dos ruedas motrices holgadamente, con Alberto sacándole el máximo rendimiento al coche y demostrando sus habilidades en carreras tan complicadas como esta.
Los problemas empezaron en el segundo bucle del viernes. Alberto recibía una penalización de 30 segundos. El motivo fue una parada de la Guardia Civil, que le hizo llegar tarde al control de salida del tramo de Valsequillo-Festina.
Aún así, Alberto seguía ampliando la ventaja y permanecía por delante de sus rivales. Pero durante el último bucle de la tarde del sábado, un problema mecánico terminaba de truncar el rallye. Un aumento de la temperatura del aceite hacía que el coche activara el modo de emergencia, limitando las prestaciones del mismo. Alberto tuvo que hacer todo el bucle con este problema que le hizo caer al segundo puesto de las dos ruedas motrices. No obstante, mantenía el liderazgo en la categoría RGT.
“Aunque estamos muy contentos con nuestro ritmo en carrera, el fin de semana nos deja un sabor un tanto agridulce. Todo lo que nos ha pasado ha sido ajeno a nosotros y por ello hemos perdido la victoria en las dos ruedas motrices. Todavía queda mucha temporada, pero es frustrante cuando las cosas salen mal sin ser nuestra responsabilidad. El equipo hizo lo que pudo para arreglarlo todo y trabajó muy duro. También me da rabia por ellos. Ahora ya estoy pensando en Adeje, donde espero poder seguir con esta trayectoria ascendente que llevamos desde principio de temporada”.
Fuente: Comunicado de Prensa