En un rallye en el que Fátima Ameneiro y Édgar Vigo tenían puestas todas sus esperanzas para lograr los puntos necesarios que les permitirían dejar sentenciado el Campeonato de España de Grupo N y poderse proclamar campeones de España de vehículos de producción FIA, una avería mecánica dejó fuera de combate a los deportistas feneses en la segunda especial.
El Rallye, constaba de más de 207 km cronometrados y el equipo sólo pudo completar alrededor de 14 km. El primer tramo, se lo tomaban como es habitual, como una toma de contacto con el vehículo para comprobar que todo funcionaba perfectamente. En la segunda prueba cronometrada y con la confianza de que todo había funcionado a las mil maravillas en la primera especial, el equipo se disponía a tomar la salida cuando justo, en el primer impulso del coche al llegar la cuenta atrás a cero, el vehículo se quedaba completamente parado sin la posibilidad de moverse por sus propios medios.
Durante los primeros instantes, el equipo intentó bloquear los diferenciales pensando en que podría ser un palier o una transmisión pero, finalmente, la avería era más importante y el vehículo no podría reemprender la marcha, siendo obligado el abandono en la competición sin prácticamente haber disfrutado de la carrera.
Fátima Ameneiro: “es una lástima ya que queríamos brindar un buen resultado a todos los afectados por el accidente de la semana pasada. Finalmente y a pesar de haberlo intentado todo, el coche fallo y es algo que tenemos que asimilar ya que también forma parte de la dificultad de las competiciones”.
Édgar Vigo: “no nos dio tiempo a disfrutar de un rallye que se preveía muy bonito y seguido por infinidad de aficionados. Es una impotencia muy grande el encontrarse en la salida de un tramo y ver que no eres capaz de desplazarte mientras el tiempo avanza en tu contra. Ahora no queda otra que pensar en Llanes y resarcirnos de esta situación”.