Javier e Iván Bouza llegaban a Portugal con la premisa de hacerse con la victoria en la Clio R3T Iberian Trophy y pelear con los mejores dos ruedas motrices entre los que se encontraban los participantes de la Peugeot 208 Rally Cup, pero diversos contratiempos hundieron al equipo en la clasificación desde los primeros compases.
Problemas de salud por parte del piloto hicieron que el rendimiento no fuera el adecuado ya en el primer bucle, lo que unido a un pinchazo en el tercer tramo le hacían perder varios minutos respecto a su rival en la copa monomarca.
El equipo encaraba la segunda jornada de competición con el objetivo de recortar la desventaja de más de dos minutos y pelear la victoria en la Clio R3T Iberian Trophy, pero las posibilidades se desvanecían en el primer bucle, ya que ante la inestabilidad meteorológica se decidía montar neumáticos de mojado para poder alcanzar a su rival si llovía, algo que no ocurrió, y con una excesiva degradación de gomas, Javier Bouza poco pudo restarle al cronómetro.
Finalmente, una segunda plaza en el Rali de Castelo Branco que sirve para seguir sumando puntos al frente de la Clio R3T Iberian Trophy, certamen que ahora llega a la prueba de casa, el Rallye de Ferrol, en poco más de dos semanas, donde el binomio tiene muchas esperanzas de marcar la diferencia como ya sucedió en Lalín y Ourense.
Fuente: comunicado de prensa.