Una lesión del copiloto Álvaro Bañobre, que fue hospitalizado, le obligó a abandonar en el Rallye de Ferrol.
Buen inicio
En un Rallye de Ferrol en que el primer y segundo equipo clasificado (Sergio Vallejo-Diego Vallejo y Víctor Senra-David Vázquez respectivamente) eran gallegos, el vigués Alberto Meira no pudo completar el éxito autóctono.
En lo deportivo, la carrera empezó bien, con el de Vincios destacando entre los mejores competidores de su clase, ocupando a mitad de rallye la quinta plaza. Según Meira: “Comenzamos a un buen ritmo, peleando con Basols y con Senra, dos pilotos que hoy han hecho un carrerón. En la mañana perdí algo de tiempo en Monfero tras hacer un trompo a mucha velocidad, pero en general, todo rodaba bien, ya que a mediodía éramos quintos y teníamos ganas de seguir atacando en los tramos de la tarde.”
Problemas para Bañobre
La sección se iniciaba con el tramo de “Ferrol-Mandiá” en el que los participantes afrontan un espectacular salto. El Mitsubishi amarillo de Fincasa realizó un vuelo lateral, en cuyo aterrizaje el copiloto Álvaro Bañobre sintió dolor en la columna. Meira cuenta que: “Álvaro bajó la cabeza y dejó de cantar las notas, me asusté y empecé a preguntarle si estaba bien, pero es como si hubiese perdido el conocimiento. Llegué ya a un ritmo lento a la meta y buscamos a un médico, que le atendió.”
Tras esas atenciones, Bañobre se encontraba algo mejor y declinó la opción de abandonar la carrera, aunque en la siguiente especial cronometrada los problemas se repetían. A poco de empezar, el copiloto volvió a resentirse por los dolores y, sin notas y ya descentrado, Meira acabó dando una leve excursión por un prado, y abandonando definitivamente. El tramo sería neutralizado y Bañobre sería evacuado a un hospital, donde le serían realizadas diversas pruebas para valorar el alcance de la lesión, resultando ser menos grave de lo que parecía, y recibiendo el alta de los doctores en la madrugada del sábado al domingo.
Más información en: www.albertomeira.net