La única prueba portuguesa de la monomarca del rombo tendrá lugar este fin de semana con el Rali de Castelo Branco, en la que Javier e Iván Bouza estarán presentes para refrendar el liderato de una copa en la que la participación ha disminuido por desgracia respecto a años precedentes, con sólo dos inscritos en las dos primeras citas puntuables.
No obstante, en cuanto a enfrentarse al resto de dos ruedas motrices, la pareja de Ferrolterra tendrá trabajo por delante, pues varios R3 y una jauría compuesta por 15 Peugeot 208 R2 con los mejores talentos de la Península Ibérica y parte del extranjero se lo pondrán difícil.
Para el piloto de Pedroso, esta es su tercera participación en el rallye luso, que se ha saldado con una victoria en la Dacia Sandero Cup en 2016 y una segunda plaza en la Clio R3T Iberian Trophy en 2017.
Buen bagaje de resultados por lo tanto en un rallye donde la premisa es sellar el triunfo en la copa monomarca y no entrar en otras luchas, aunque sí puede ser baremo para lo que los Bouza puedan hacer en las dos pruebas del Campeonato de España de Rallyes de Asfalto que puntúan para la Peugeot Rally Cup Ibérica y donde tendrán, al igual que aquí, que pelear duro para luchar por la victoria entre los vehículos de tracción simple.
Cuatro tramos a doble pasada, una superespecial y otro tramo a una pasada es el rutómetro que conforma esta prueba, una de las mejores del Campeonato Portugués de Rallyes, sumando 130 kilómetros cronometrados.