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El Campeonato Gallego arrancó este fin de semana con la disputa del II Rallye Comarca de Ulloa, una prueba en la que uno de los equipos favoritos para alzarse con la victoria era el formado por los hermanos Burgo, que esta temporada les tocará defender el Campeonato Absoluto logrado el año pasado. Una mañana soleada fue la encargada de recibir a los pilotos en los primeros tramos del día, pero pronto una nube se cruzaría en el camino de Pedro y Marcos Burgo. |
En el segundo tramo del día, un problema mecánico en su Mitsubishi EVO VIII les hacía perder casi un minuto y caer en la clasificación general hasta la octava plaza de la general. Un duro contratiempo para el equipo lucense, que no obstante no bajó los brazos y se propuso la difícil tarea de recortar las diferencias e intentar enmendar de algún modo la clasificación en una prueba que cuenta este año con coeficiente 7.
Y así las cosas, al mediodía el equipo de Café Candelas y Hankook ya había logrado situarse en la segunda posición de la general, sólo superados por los hermanos Vallejo, que les sacaban una diferencia de un minuto con cuatro tramos por disputarse. Sin embargo, Pedro y Marcos no lograron culminar la gesta, en parte por las neutralizaciones que asolaron al rallye en su segunda sección y que sólo permitieron correr dos de los cuatro tramos previstos.
“Ha sido un rallye complicado, tanto por lo que pasó en la carretera como fuera de ella. Muy pronto se nos puso cuesta arriba, con un problema mecánico que nos hundió en la general. Sin embargo demostramos el porque el año pasado fuimos los campeones y este segundo puesto no es tan malo. Todavía está empezando la temporada y estos puntos pueden valer su peso en oro al final del año.” Así se explicaba Pedro Burgo al final del rallye.
Y así las cosas, al mediodía el equipo de Café Candelas y Hankook ya había logrado situarse en la segunda posición de la general, sólo superados por los hermanos Vallejo, que les sacaban una diferencia de un minuto con cuatro tramos por disputarse. Sin embargo, Pedro y Marcos no lograron culminar la gesta, en parte por las neutralizaciones que asolaron al rallye en su segunda sección y que sólo permitieron correr dos de los cuatro tramos previstos.
“Ha sido un rallye complicado, tanto por lo que pasó en la carretera como fuera de ella. Muy pronto se nos puso cuesta arriba, con un problema mecánico que nos hundió en la general. Sin embargo demostramos el porque el año pasado fuimos los campeones y este segundo puesto no es tan malo. Todavía está empezando la temporada y estos puntos pueden valer su peso en oro al final del año.” Así se explicaba Pedro Burgo al final del rallye.
La siguiente cita para el equipo lucense volverá a ser con el Campeonato Gallego. Será el próximo 14 de marzo con la disputa del XV Rallye do Cocido, que se disputa en Lalín. Allí el objetivo será el de lograr la victoria y situarse al frente de la general absoluta en el Campeonato Gallego.